Cultura
viernes, 19 de abril de 2024

La Fundación Larivière inauguró la exhibición "La Vida es la Calle"

Hasta fines de agosto se podrán apreciar trabajos del reconocido fotógrafo colombiano Fernell Franco en Caboto 564 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires 

Exhibición "La Vida es la Calle" FOTO: WEB
Exhibición "La Vida es la Calle" FOTO: WEB

La Fundación Larivière - ubicada en Caboto 564  de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires  - inauguró la exhibición " La Vida es la Calle" con trabajos del reconocido fotógrafo colombiano Fernell Franco. Desde la Fundación Larivière señalaron que Fernell Franco nació en Versalles, Valle del Cauca, 1942 y fallecio en Cali, 2006. En 1951, la guerra civil que arrasó Colombia obligó a la familia de Fernell Franco a huir de su pueblo para establecerse en la ciudad de Cali. Con apenas 14 años, Franco empezó a trabajar en un estudio fotográfico como mensajero. Luego fue “fotocinero”  - tomaba fotografías de los transeúntes en las calles y luego les vendía los retratos -.La exhibición "La Vida es la Calle" se podrá visitar hasta fines de agosto de 2024.
buenosairesinforma.com reproduce texto difundido por la Fundación Larivière:
"...Fundación Larivière inaugura La vida es la calle, exhibición del reconocido fotógrafo colombiano Fernell Franco (Versalles, Valle del Cauca, 1942-Cali, 2006).

“La estética que Franco consolida a lo largo de más de treinta años de carrera forma parte de un género de la cultura visual caleña que se ha denominado “gótico tropical”, y en parte se manifiesta en entornos en su mayoría oscuros y en ruina, pero que también exaltan la festividad y complicidad social que existen en las sociedades latinas y que se forjan en el espacio público. Las calles como epicentro de encuentros de pandillas, las tabernas que prácticamente toman las vías tienen un protagonismo esencial en la vida cotidiana como espacios de ocio, juego y baile”, escribe María Wills Londoño, en el texto curatorial.
Prostitutas (realizada entre 1971 y 1972) es uno de los ensayos más destacados de la fotografía latinoamericana, en el que Franco experimentó con la imagen. “Por su parte en los prostíbulos de Buenaventura, puerto del pacífico colombiano que Franco visitaba continuamente, pudo superar su timidez y soledad al generar vínculos de amistad con las mujeres que vivían allí, a quienes retrató en toda su potencia, fuerza y poder”, añade Wills Londoño.

Bio Resumida Fernell Franco (Versalles, Valle del Cauca, 1942-Cali, 2006)
En 1951, la guerra civil que arrasó Colombia obligó a la familia de Fernell Franco a huir de su pueblo para establecerse en la ciudad de Cali. Con apenas 14 años, Franco empezó a trabajar en un estudio fotográfico como mensajero. Luego fue “fotocinero” (tomaba fotografías de los transeúntes en las calles y luego les vendía los retratos).

Ya con 20 años, se desempeñó como reportero gráfico de los diarios El País y Occidente, donde cubrió la violencia en Colombia. Franco señaló sobre esta experiencia extrema: “En los pueblos, era una guerra en descampado. Mi cámara estaba equipada con un flash electrónico. Pisaba los cadáveres, apuntaba y disparaba. Sentía como si el destello de luz no saliera de la cámara, sino más bien de mi cerebro, como si la escena no quedara registrada en el negativo, sino en mi memoria, donde la recordaría toda la vida”.

Versátil, también trabajó en la sección Sociales de los diarios y como fotógrafo de modas en una agencia de publicidad vanguardista dirigida por Hernán Nicholls, donde conoció a los cineastas Luis Ospina y Carlos Mayolo.  Y en 1970, empezó a trabajar en su serie Galladas, donde puso el foco en las pandillas de jóvenes (galladas, en el argot colombiano) en Cali.

En su serie Prostitutas, fotografió a niñas y mujeres que trabajaban en uno de los últimos burdeles de  Buenaventura. “Cuando les pregunté a mis amigos si valía la pena montar una exposición sobre este tema, me dijeron que el tema era más viejo que Matusalén. Por lo tanto, tomé la idea de antigüedad y le di una tonalidad pasada de moda a algunas de las fotografías”, recordó el artista.
Al realizar la muestra de la serie Prostitutas en el espacio Ciudad Solar, en 1972, tuvo la intención de ambientar la muestra con salsa con el fin de crear una experiencia menos estática y más cercana al contexto alegre que se vivía en tabernas, discotecas y burdeles.

Su ojo agudo registró muchas de las zonas urbanas que estaban desapareciendo con rapidez: casas viejas, abandonadas por sus dueños, que se habían convertido en viviendas improvisadas de pobres y desplazados. Y en los ochenta, comenzó su serie Demoliciones, en la que registró la destrucción de los edificios históricos de la ciudad, reemplazados por otras construcciones modernas, financiadas en parte por los carteles de las drogas.

En la Bienal de Venecia, participó en Colombia en blanco y negro (1981), importante exhibición dedicada a la fotografía del país e integrada por imágenes de veintitrés reconocidos artistas. Un año después, una selección de fotografías de la exposición Coloquio Latinoamericano de Fotografía de la Ciudad de México se presentó en el Centre National d’Art et de Culture Georges Pompidou, en París.

Ya tras su muerte, en 2016, la Fondation Cartier pour l’Art Contemporain presentó la primera retrospectiva europea de la obra de Franco. Y en 2018 una serie de seis fotografías suyas ingresó a la colección de la Tate Gallery de Londres.

María Wills Londoño, curadora de la exhibición, es una prestigiosa historiadora del arte. Fue seleccionada curadora de la bienal de la imagen MOMENTA de Canadá por su proyecto La vida de las cosas. Con su ensayo El centenario de la Bauhaus: de conveniencias y conexiones ganó el premio Simón Bolívar de periodismo (2019). Sus proyectos curatoriales han sido exhibidos en instituciones tan reconocidas como el Centro Internacional de Fotografía de Nueva York, el Jeu de Paume y la Fondation Cartier pour l’Art Contemporain de París, la Photographers Gallery de Londres, el Círculo de Bellas Artes de Madrid (PHotoESPAÑA), el Centro de la Imagen de Ciudad de México, el Museo de Arte Moderno de Bogotá y el Museo de Arte Miguel Urrutia del Banco de la República de Colombia, del cual fue directora entre 2019 y 2023.
Sobre la Fundación Fernell Franco
Los recursos iniciales para la Fundación se obtuvieron gracias a un premio de la Universidad de Harvard y David Rockefeller Center for Latin America Studies, otorgado a Fernell Franco en 2006, justo antes de morir.
Hoy, la misión de la Fundación Fernell Franco es preservar, promover y estudiar el patrimonio fotográfico del artista, contribuyendo al enriquecimiento cultural de Colombia y promoviendo el reconocimiento internacional de la fotografía latinoamericana.
Desde la creación de la Fundación, su obra viajó a México, Chile, Brasil, Costa Rica, España, Francia, Cuba y Estados Unidos. Con la dirección de Vanesa Franco, entre 2005 y 2009, la Fundación Fernell Franco se dedicó a la tarea de recuperar y catalogar los negativos de su padre.
Gracias a la meticulosa catalogación emprendida, se descubrieron aspectos de la obra de Fernell que de otro modo habrían pasado desapercibidos. Por primera vez, se pudo apreciar con claridad las secuencias de la transformación desde el negativo, los estudios hasta llegar a cada obra y las múltiples intervenciones sobre el papel, las cuales revelan un estilo casi pictórico. A través de su trayectoria, Fernell muestra su incansable búsqueda de la imagen. Cada pieza de su obra es un original que refleja la singularidad y el ingenio de su creador.
Caboto 564
Jueves a domingo, de 12 a 19h
Hasta fines de agosto
Bono contribución: 1000 pesos".