Cómo se crea una tendencia en redes sociales

Suelen ser efímeras, pero de gran impacto. Cuando estábamos transitando el segundo trimestre de este año, de pronto aparecieron miles de patitos amarillos en la cabeza de la gente. Recorrían las ciudades mostrando su color amarillo en las calles grises pintadas de otoño. Esta moda surgió a partir de TikTok en donde diversos usuarios comenzaron a desarrollar contenido con el patito Kawaii (adorable), una estética japonesa que se trasladó al mundo del entretenimiento y del animé.

Claro que las tendencias siempre existieron, por caso la moda, el maquillaje y la peluquería son claro ejemplo de esto. Algunas incluso vuelven, como ser la ropa extra grande, incluso hasta se resignifican. Pero lo novedoso de esto es que no pasan meses o años, sino que, con las redes sociales, casi de un día para el otro las publicaciones comienzan a parecerse, a mostrar comportamientos y elementos similares en diversas partes del mundo.

Uno podría pensar que con los recursos que hoy se tienen para la generación de contenidos, lo más efectivo sería la diferenciación y no sumarse a una ola que inició otro usuario. Si bien esto puede ser cierto, la realidad es que va a depender del objetivo que se busque. Como ejemplo, en la serie Emily in Paris, a partir de una publicación de productos femeninos por parte de la protagonista que es indicada con un “me gusta” de  la esposa del presidente Macrón, el perfil comienza a ganar seguidores de forma orgánica. Claro que también ese mismo contenido circula en miles de esos perfiles.

Fantasía, realidad, en verdad algo de esto es lo que realmente sucede en el mundo digital. TikTok, Instagram y X motorizan contenidos por medio de su algoritmo a partir de determinadas variables. Por eso, en determinado momento, se muestran publicaciones sobre un mismo tema, porque son tendencia.

Consistencia es tendencia

Si bien cada red posee su lenguaje, estética y formas de llegar a los usuarios, hay determinadas variables que comparten y que hacen que el algoritmo viralice un contenido. TikTok es tal vez la red más usada para marcar tendencia en desafíos de baile, en tanto que Instagram con los unboxing marcó todo un camino. El caso de X ya es diferente, que un tema se convierta en “trending topic” se lo puede considerar como una tendencia. Claro que el tiempo es mucho más corto y puede durar solamente algunas horas. El caso más destacado del X son los tweets de los políticos, quienes muchas veces agradecen la velocidad de esta red social.

Pero veamos algunos elementos que ayudan a que un contenido se convierta en tendencia en las redes sociales en general.
El primer ítem a tener en cuenta es el tema. Sí, más allá de todo, el contenido necesita tener una historia. Los usuarios siempre buscan que se les cuente una historia. Hay temas que son más simples, como ser deportes con especial foco en el fútbol, que otros como el índice de rayos UV.

Una vez seleccionado el tema, se pasa a la creación. El contenido debe tener imágenes, videos, colores, música que sean atractivos. Puede ayudar elegir música que ya sea una tendencia en Instagram, por ejemplo. Claro que se debe tener una armonía entre lo que se muestra y la canción elegida. Algo así como integridad de contenido.

Otro elemento fundamental son los famosos hashtags, es decir esas palabras que son utilizadas por los usuarios para buscar, justamente, temas atractivos. Si solamente usamos hashtags que sean personales y muy específicos, tendremos menor chances de alcanzar a los usuarios.

Ahora bien, todo esto no tiene sentido si no tenemos en cuenta la otra parte de una red social, los usuarios. Es muy difícil que una cuenta recién creada se convierta en tendencia, pero no imposible. Sin embargo, los perfiles con mayor cantidad de usuarios tienen mayor posibilidad de que sean mostrados en mayor medida por el algoritmo.

De este punto se desprende todo el resto que se necesita para crear una tendencia. Hay que estudiar a la audiencia, saber quiénes son, qué tipo de contenidos les gustaron, qué hicieron con ellos y en qué momento visitan el perfil. Estos datos se traducen en comentarios, reposteos, engagement, veces que se comparte un contenido y son de vital importancia para amplificar la llegada a más usuarios. Si la cuenta no tiene estos elementos, es probable que la tendencia se traduzca en los 5 amigos más cercanos que siguen el perfil. Pero hasta ahí llegamos, es como quedarse en el furgón de cola digital del algoritmo.

Conocer a la audiencia termina de cerrar un círculo virtuoso en donde lo primero, el tema, se une a los seguidores. Para alimentar ese círculo que va a lograr que un contenido sea tendencia, lo que se debe tener es constancia. Publicar de forma regular genera hábitos en la audiencia que terminan traduciéndose en beneficio para la cuenta.

Esta forma orgánica se puede complementar con otras acciones para hacer crecer rápido a una cuenta. Así, la planificación de una campaña publicitaria, sin lugar a dudas, va a favorecer que se muestre a miles de usuarios esa pieza. También, de la mano de influencers, se puede lograr instalar una tendencia. Todo va a depender del presupuesto y de las urgencias para que el contenido llegue a los usuarios.